Eficiencia de las calderas de condesación

Eficiencia de las calderas de condesación

En otro post os explicábamos 7 razones sobre por qué las calderas de gasóleo son la mejor opción para vuestros hogares. Hoy iremos un paso más allá y os contaremos por qué las calderas de condesación son la mejor opción dentro de las que se ofrecen en el mercado.

Las calderas de condensación se caracterizan fundamentalmente por aprovechar la energía obtenida debido a la condensación del vapor de agua, contenida en los humos producto de la combustión, para precalentar el agua de entrada al equipo.

Eficiencia de las calderas de condesación

En las calderas corrientes los humos evacuados pueden alcanzar 150ºC para evitar condensaciones y facilitar el tiro. Dicho vapor de agua expulsado hacia el exterior contiene un calor latente que es desperdiciado. En cambio si dicho vapor de agua condensa, cambia de estado gaseoso a estado líquido cediendo calor.

En el caso de las calderas de condensación, al contrario que las calderas convencionales, este calor residual es aprovechado para precalentar el agua, aumentando por lo tanto el rendimiento de la misma hasta valores superiores al 100%. Esta es la razón básica de la eficiencia de las calderas de condensación.

Fases de la transmisión de calor en las calderas de condensación

En las calderas de condensación, el calor se transmite en tres fases diferenciadas:

  1. Fase en la que la llama de la combustión del gas transmite el calor al agua por radiación.
  2. Fase o fase de conducción-convección.
  3. Fase o fase de condensación-convección donde el cambio de estado del vapor de agua contenido en los humos es aprovechado por la caldera.

Temperatura del agua en las calderas de condensación

Para que se produzca la condensación del vapor de agua contenido en los humos, en primer lugar es necesario garantizar que el agua de retorno está por debajo de la temperatura de rocío. Por otro lado el valor de la temperatura de rocío de los humos dependerá de la cantidad de vapor de agua contenida (presión), del exceso del aire y del tipo de combustible.

Eficiencia de las calderas de condesación

Una vez conocido el valor de la temperatura de rocío, cuanto más fría esté el agua de retorno respecto de dicha temperatura más se aprovechará el fenómeno de la condensación. Por lo tanto cuanto mayor sea la diferencia de temperatura más calor se cederá. Y si hay más condensación entonces el rendimiento energético de la caldera de condensación será mayor.

Una vez los humos han cedido el calor al agua, la temperatura reducida de estos puede oscilar entre los 30°C y los 100°C, por lo que si el tiro no es el suficiente para evacuar dichos humos puede que sea necesario la instalación de un ventilador que los extraiga.

Rendimiento y eficiencia de las calderas de condensación

Como se ha comentado antes, el rendimiento de estas caldera supera el 100% (siempre respecto a poder calorífico inferior) frente a las convencionales con valores entre 70-80%. Esto se debe a que aprovechan el calor de condensación para calentar el agua de retorno de la caldera. Utilizan el poder calorífico superior sin poner en peligro la caldera. El resultado final es el de rendimientos superiores hasta incluso en un 30% más que el rendimiento máximo obtenido por una caldera convencional.

Eficiencia de las calderas de condesación

Las 7 razones por las que la de gasóleo es la mejor caldera para tu hogar

7 Razones para la caldera de gasóleo

Las calderas de gasóleo son uno de los métodos existentes más eficientes para calentar la vivienda y resultan la solución ideal para cubrir no sólo las necesidades de calefacción, si no también de agua caliente.

¿Por qué entonces es la mejor caldera para tu hogar?

1- No hay riesgo de explosiones. La seguridad ante todo

A diferencia de otro tipo de energías que son inflamables a cualquier temperatura, las calderas de gasóleo funcionan a temperaturas mayores a los 60ºC sin correr riesgos de explosiones; esto demuestra su confiabilidad, además no necesita de medidas de seguridad o prevención que puedan encarecer el costo de la instalación.

2- El uso continuado del gasoil conserva y protege la caldera más tiempo

El uso continuado del gasoil en la calefacción permite la conservación y protección de la caldera, reduciendo al mismo tiempo las revisiones y los costos de mantenimiento que pueda necesitar.

De esta forma el sistema de calefacción consume un 10% menos de combustible; con el gasóleo nos aseguramos una adecuada protección del tanque de almacenamiento contra la proliferación de bacterias mejorando al mismo tiempo la calidad de aire, utilizando este equipo, disminuye la emisión de gases y partículas durante el proceso de combustión.

3- Alto rendimiento en combustión

Además posee excelentes propiedades anticorrosivos y bactericidas, mejora el comportamiento en frío y carece de olor a gasóleo lo que garantiza nuestra comodidad.

4- El coste de la instalación es menor que en otros sistemas

5- La libertad de precio

El gasóleo está a régimen de mercado libre y por ende contamos con la posibilidad de comparar distintos precios sin tener que aceptar uno ya impuesto.

6- No tiene costes fijos

Las empresas de otro tipo de energía para calefacción nos cobran una serie de costos fijos en concepto de alquiler de contador que deben pagarse incluso si no utilizamos la calefacción.

7- Regula la temperatura acorde con las variaciones climáticas

Las calderas de gasoil incorporan las más modernas tecnologías, entre ellas, termostatos electrónicos que nos permiten regular la temperatura de acuerdo a las variaciones climáticas.

Consecuencias de la adulteración del gasóleo

Consecuencias de la adulteración del Gasóleo

Todos recordamos el escándalo producido hace unos años por la adulteración del gasóleo. Hoy queremos aportaros el punto de vista de profesionales independientes, desde el punto de vista de los profesionales del motor. Compartimos esta información de la revista noticiascoches.com que puedes visitar pinchando el enlace.

Las cifras del fraude son escandalosas, ya que el gasóleo es el combustible más utilizado en España, clave sobre todo en el transporte profesional. En estos momentos existen tres tipos de gasóleo a la venta: el de automoción o A, el agrícola o B y el de calefacciones o C. Estos dos últimos pagan muchos menos impuestos, de ahí que cada uno cuente con un aditivo que le da un color especial, lo que facilita distinguirlos y evitar fraudes. Aparte de ese color, se trata del mismo producto… ¿o puede sufrir el motor de tu coche si respostas uno de estos combustibles fraudulentos?

Antes de nada, conviene saber cómo funciona un motor diésel. A diferencia de un propulsor de gasolina, donde una bujía envía una chispa para que se produzca la combustión, en un motor diésel esta detonación se produce mediante presión. Esto solamente ocurre su el combustible tienen una alta capacidad de ignición (conocido como índice de cetano, o intervalo de encendido, el tiempo que transcurre entre la inyección del carburante y el comienzo de su combustión).

Otro factor importante es el índice de viscosidad. A mayor fluidez, más sencillo será de pulverizar, lo que favorecerá la detonación. Si la viscosidad es baja perderá capacidad lubricante y causará daños en la inyección (el sistema que ha permitido que los motores diésel hayan ganado en potencia y prestaciones al tiempo que bajan consumos, junto al empleo del turbo).

¿Qué convierte a un gasóleo en buen diésel?

A la hora de repostar combustible uno puede optar por hacerlo en una estación de servicio de una gran petrolera, en un surtidor independiente o incluso en una cadena de hipermercados. Todos ofrecen un mismo producto, un derivado del petróleo refinado de igual modo, pero luego se incluyen los aditivos, uno de los grandes secretos industriales de las petroleras, ya que es lo que diferencia su producto de la competencia.

Gasoleo

Estos aditivos tienen fines claros: mejorar la viscosidad, evitar que el diésel se solidifique (algo que puede ocurrir en invierno), reducir el hollín y que mantenga el circuito limpio… Su nivel de complejidad química hace que se invierta mucho dinero en ellos… y se trate de productos caros. De ahí que se añadan pocos.. y solamente en los gasóleos que lo precisen: un gasóleo A de automoción lo tendrá, pero no siempre un gasóleo C de calefacción, por ejemplo.

Además, a la hora de colorear un gasóleo de un tipo para que parezca otro, hay que añadir algunos productos químicos… que a veces no son demasiado adecuados para un motor. O aún peor: se han llegado a conocer casos en los que se añadían, para aumentar el volumen, otros hidrocarburos peores, aceites vegetales, desechos de refinado… y hasta agua.

Problemas de repostar un mal diésel

Parece claro entonces que utilizar un gasóleo no destinado a automoción pueda causar daños al motor. Desde perder algo de prestaciones y aumentar humos a sufrir problemas más graves, como obstruir los filtros o dañar la EGR (la válvula de recirculación de los gases de escape). Si el uso es continuado, podríamos hablar incluso de daños en inyectores o que “gripe” la bomba de alta presión, que obliga a cambiar por completo el circuito de combustible.

Los problemas serán mayores cuánto mayor sea el nivel de complejidad el motor. Hoy la práctica totalidad de los diésel cuentan con turbo, sistemas de inyección directa que funcionan a altas presiones, válvula EGR, filtros de partículas, reducción catalítica por medio de aditivos (Adblue)… Si en un motor diésel de los años 90 apenas provocaba un aumento de humos, por ejemplo, podría suponer la “muerte” de una mecánica de última generación.

La solución es repostar en lugares de confianza, que realicen el mantenimiento de sus depósitos tal y como exige la ley y que sirvan el combustible como lo suministra la petrolera. El problema radica que, hoy por hoy, no se puede analizar de forma rápida el gasóleo (que debe ser llevado a un laboratorio para comprobar su nivel de pureza), de ahí que, una vez descubierto el fraude, ya se habrá repostado gasóleo fraudulento. Solamente se podrá reclamar si se conserva el ticket de cada repostaje, si bien lo ideal de cara a esa futura reclamación sería contar con una factura, en la que se detalle la matrícula del vehículo y el número de kilómetros que tenía en ese repostaje… algo que, seguramente, sólo harán los profesionales.

En Gasóleos Capela presumimos de vender sólo los mejores combustibles y carburantes con todas las garantías.